
Hay magia en una taza de té, en el ritual imprescindible para conseguir un “té de verdad”, en el cuidado y el cariño necesarios para conseguir una mezcla perfecta que calme el espíritu y despeje la mente. Así me gustaría ser: libre, con el corazón en calma y la cabeza a 1000 por hora.
Sólo me falta poder mirar a mi hija a los ojos y decirle que es cierto, que la magia existe de verdad, sin remordimientos, sin dudas, sin complejos. Ese día sere, al fin, libre.
Traducido de: http://meigamoneka.blogspot.com/2008/09/se-fose-un-caf.html
3 comentarios:
BENVIDAAAA!!!
El misterio que entraña el hecho de que tu hija se formará dentro de ti y ahora tenga el tamaño y la forma que observas, es MAGIA.
Siéntete libre, you can do it!!!
Me reí mucho con tu correo renegando sobre las maravillas del café; y ya veo que de inmediato aparece el té. Siempre me ha llamado la atención que estas dos bebidas parezcan contrapuestas.
Magia y libertad, ese sueño por el que deberíamos luchar con más fuerzas cada día.
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